En febrero había 932,000 puestos de trabajo disponibles
Ahora que ha ido retrocediendo la pandemia y que la gente está encontrando una nueva normalidad, la más grande dificultad que enfrentan muchas empresas es conseguir suficientes trabajadores.
Texas tenía 932,000 ofertas de empleo en febrero, la mayor cantidad desde que el gobierno empezó a compilar este dato hace más de dos décadas.
Además, 400,000 texanos dejaron su empleo ese mismo mes, lo cual no fue un récord pero estuvo cerca de serlo.
Los empleadores llevan tiempo quejándose de la escasez de talentos, y luego la pandemia hizo a muchos salir de la fuerza laboral.
En una encuesta realizada en abril por el Banco de la Reserva Federal en Dallas entre ejecutivos de empresa en Texas, casi dos tercios dijo que estaba tratando de contratar trabajadores o reconvocar a los que ya tenían.
Alrededor del 30% dijo que la situación había empeorado en el último mes.
Su más grande obstáculo, por mucho, ha sido la falta de solicitantes; y el segundo, que pedían un salario más alto del que les ofrecían.
“Es un doble golpe”, escribió un ejecutivo no identificado de una compañía de procesamiento de datos en los comentarios al Dallas Fed.
“Contratar talento es un problema fundamental —talento mínimo disponible—, y eso está retardando el crecimiento. Pagar mucho más por retener a los empleados también retarda el crecimiento porque queda menos dinero para contratar”.
Una ejecutivo de una compañía de servicios administrativos y de apoyo también dijo que estaba batallando para conseguir trabajadores.
“Aun con el aumento de salarios que está afectado seriamente nuestros márgenes, no logramos contratar”, escribió. “Trabajo hay, lo que no hay es quién lo haga”.
En 2019, el año antes de la pandemia, Texas promediaba 575,000 ofertas de trabajo al mes.
El total de febrero, la estadística más reciente disponible, era un 62% mayor.
En el mercado laboral nacional se está observando una tendencia similar.
En febrero, en el país había casi 11.3 millones de vacantes, en contraste con las alrededor de 7 millones que había justo antes de la pandemia.
Existen vacantes en manufactura
El sector de la manufactura en Texas continúa creciendo y los nuevos pedidos aumentando, pero la perspectiva general era más débil en virtud del aumento de los salarios y los precios, dijo Emily Kerr, economista de negocios del Dallas Fed.
“Varios fabricantes comentaron que la escasez de materiales y trabajadores limita su capacidad para satisfacer la demanda”, dijo Kerr.
Entre los fabricantes, la perspectiva de la empresa cayó a su punto más bajo en dos años, según el Dallas Fed.
Además, el 40% de los ejecutivos dijo que la incertidumbre había crecido en el último mes.
“La demanda continúa superando nuestra capacidad de abastecer”, escribió un ejecutivo de una compañía fabricante de componentes electrónicos para computadora.
“Falta mano de obra!”, escribió un fabricante de productos de madera. “¿Necesita trabajo?”.
En noviembre, Texas y Dallas-Fort Worth rebasaron un hito cuando el empleo total superó al máximo alcanzado antes de la pandemia.
Esto significa que el estado y el área metropolitana habían recuperado totalmente sus empleos perdidos, aunque seguía habiendo algunas categorías rezagadas.
El sector de la manufactura a nivel estatal, por ejemplo, tenía poco menos de 903,000 trabajadores en marzo, 7,000 menos que en febrero de 2020, justo antes de que se decretara el confinamiento y se recortaran empleos masivamente debido a la pandemia.
La magnitud de la actual escasez de trabajadores “no tiene precedentes” entre las compañías productoras de bienes, dijo Tony Bennett, director ejecutivo de Texas Association of Manufacturers.
“Es un problema que empezó hace muchos años, y covid solo vino a exacerbarlo”, dijo.
“Hay una idea errónea acerca de la manufacutura de hoy… y de las oportunidades para hacer una carrera”.
¿Es rápido con el teclado?
La manufactura inteligente de hoy nada tiene que ver con fábricas sucias, dice, y hay muchas oportunidades para quienes gustan de la tecnología, incluso para los jóvenes hábiles para los videojuegos.
“Si son rápidos con el teclado, van a hacer mucho dinero en esas empresas”, dijo Bennett.
El salario inicial con frecuencia empieza arriba de los $40,000, dijo, y los trabajadores de manufactura experimentados llegan a ganar el doble.
En cuanto a los que trabajan en la industria de los semiconductores, los salarios anuales pueden llegar a los seis dígitos, y señaló que Texas Instruments planea construir nuevas plantas de producción de microchips pronto.
Los fabricantes están instituyendo programas de adiestramiento y formando consorcios regionales de contratación para trabajar con escuelas preparatorias y colegios comunitarios.
Ofrecen capacitación pagada y hasta reembolso de colegiatura.
“Todos estamos en lo mismo”, dijo Bennett. “Capacitemos a esos muchachos y hagámonos del personal que necesitamos”.
Aunque Texas tiene más vacantes que nunca antes, el estado también tiene un elevado número de trabajadores y empleados recién contratados que dejan su trabajo.
Durante la pandemia muchos trabajadores reconsideraron su carrera y aprovecharon para cambiar de ramo.
El surgimiento del trabajo a distancia cambió el panorama laboral, ya que para muchos ofrecía un mejor equilibrio entre vida y trabajo, especialmente los que tienen a alguien que cuidar en casa.
En su encuesta, el Dallas Fed preguntó sobre el trabajo a distancia, y solo el 8% de los empleados estaba trabajando a distancia antes de la pandemia.
En abril, esa cifra era de 39%, la mayoría en un esquema de trabajo híbrido. Los ejecutivos prevén que en el futuro el 36% de los trabajadores trabajarán a distancia.
“Ya estamos bastante cerca de la nueva normalidad”, dijo Kerr.
Algunos no tienen la opción de trabajar desde casa.
Poco más de la mitad de los empleadores particulares no ofrecieron la posibilidad de trabajar desde casa a sus empleados durante la pandemia, de acuerdo con la Oficina Federal de Estadísticas Laborales.
Entre ellos, más del 90% de los hoteles y empresas de servicios de comida, y el 75% de las tiendas de venta al por menor.