Los demócratas esperaban ganar el control de la Cámara estatal por primera vez desde la elección del 2002. El partido necesita ganar nueve escaños para tomar el control de la Cámara, que consta de 175 miembros y está liderada por los republicanos.
Joe Moody dio a conocer que el partido que obtenga el control podrá elegir al siguiente presidente de la Cámara, y esperaba que los demócratas prevalecieran este martes.
“Yo creo que al final del día, los demócratas habrán conseguido la mayoría en la Cámara de Texas”, dijo.
La carrera por el puesto de presidente es probable que sea reñida, independientemente de cuál partido gane la mayoría.
El actual presidente, el representante republicano Dennis Bonnen de Angleton, no buscó la reelección a su escaño en la Cámara después de haber sido grabado atacando a miembros de su propio partido y a otros integrantes de la Cámara.
En la sesión legislativa del 2019, Bonnen escogió a Moody para que se desempeñara como su presidente temporal, una influyente posición de liderazgo en la Cámara.
En el lado demócrata, los representantes de partes clave de la base del partido –mujeres, afroamericanos y latinos– se espera que luchen por el puesto de presidente. La representante demócrata Senfronia Thompson de Houston, declaró su candidatura hace dos semanas.
Moody comentó que la frontera entre Texas y México debería tener una voz influyente para moldear la política estatal.
“No hay ningún lugar en el estado que haya sido el objetivo más grande de la incendiaria retórica política. Y vamos a responder a ese odio y a esa negatividad, seremos una parte vocal de esa respuesta. Y esa respuesta será de amor y fortaleza”, dijo.
El paseño dijo que puede ser una influencia unificadora en el liderazgo de Texas en un momento en que se necesita mucho.
“Las divisiones que estamos enfrentando nunca habían sido tan profundas. Se necesita sanar mucho, sanar de muchas cosas, del rencor político, de la pandemia y la violencia que han visitado a nuestra comunidad de El Paso de una manera tan trágica”, dijo Moody.
“Y si vamos a puentear esas divisiones y unir a la gente, necesitamos de alguien que tiene un historial de sanación y que ha unido a la gente. Ése es el trabajo que hemos hecho durante más de una década en la Cámara y del que estamos orgullosos, trabajando para la minoría, construyendo puentes y asegurándonos de que todas las voces sean escuchadas en la mesa”.
Moody de 39 años, es un abogado que trabaja actualmente para WestStar Bank. Su padre, William Moody, es el juez de la Corte de distrito que más tiempo ha servicio en El Paso y realizó tres infructuosos intentos para llegar a la Corte Suprema de Texas. Su madre, Maggie Morales Moody, es una educadora y defensora de los niños con síndrome de Down.
Joe Moody y su esposa, Adrianne, tienen dos hijos pequeños.
Él fue electo primero a la Cámara en el 2008 pero fue derrotado en su intento de reelegirse en el 2010 por el actual alcalde Dee Margo. Moody ganó nuevamente su escaño en el 2012 y no ha sido desafiado seriamente desde entonces. En este año enfrena al republicano Jeffrey Lane, quien perdió ante Moody en el 2018 por más de 30 puntos.
En la Cámara, ha sido líder de la reforma bipartidista de justicia penal y los esfuerzos para despenalizar la mariguana.
Prestó sus servicios como director político del paseño Beto O’Rourke en su carrera al Senado de Estados Unidos en el 2018.
Por Robert Moore / El Paso Matters
Foto: Cortesía / Joe Moody
Créditos: diario.mx
