La administración del presidente Joe Biden está dispuesta a hacer ajustes para que su ambicioso paquete de estímulo no detenga el envío de una nueva ronda de cheques para los estadounidenses que se han visto afectados económicamente por la pandemia del coronavirus, según dijo este martes el principal asesor financiero del presidente, Brian Deese, entrevista con CNBC.
El paquete de estímulo de $1.9 billones incluye varias iniciativas para ayudar a los estadounidenses de las cuales se ha estado hablando durante los últimos días. Primeramente, están los cheques de $1,400 para completar los $2,000 prometidos en diciembre, además del aumento del salario mínimo a $15 la hora.
Asimismo, Biden anunció que habrá un nuevo beneficio para los niños de horgares pobres pues sus padres recibirían $300 mensuales si son menores de 6 años y $250 a partir de los 6 hasta los 17 años.
Sin embargo, el plan no cuenta con el apoyo de los republicanos en el Senado. Aunque en este momento ambas Cámaras tienen una mayoría demócrata, el plan debe contar con al menos 60 votos para que sea aprobado. Pero los republicanos insisten en que debe aprobarse un plan más conservador.
A pesar de que la aprobación del nuevo paquete de estímulo pudiera estancarse, el líder de la minoría demócrata en el Senado, Chuck Shumer dijo que seguirán adelante a pesar de la oposición. Pero la única manera de que seguir adelante sin un acuerdo bipartidista sería mediante la llamada “Reconciliación Presupuestaria”.
El proceso de reconciliación fue creado por la Ley de Presupuesto del Congreso de 1974 y se utilizó por primera vez en 1980.
Esto significa que, aunque no se logren los 60 votos en el Senado, este proyecto de ley permitiría que el presupuesto se aprobara con una “mayoría simple”.
Para seguir adelante habría que pedirles a algunos de los Comités de la Cámara Alta que ajusten los gastos e ingresos del plan presupuestario. Cada Comité redactaría un proyecto de ley, lo presentaría y finalmente el Comité de Presupuesto reuniría las propuestas en un gran proyecto de ley que tendría que ser aprobado.
No obstante, esto podría afectar al partido demócrata, pues iría totalmente en contra del mensaje de unidad que el presidente Biden ha promulgado desde que juramentó.
De hecho, el pasado lunes el mandatario sostuvo que podría haber cambios en los términos del paquete de estímulo y comunicó que estaría dispuesto a negociar algunos puntos.
Tan pronto como la próxima semana pudiera haber una votación sobre el plan. Será en ese momento cuando habrá más luz sobre si llegará un tercer cheque o no.
No obstante, lo que está claro es que el 79% de los estadounidenses esperan recibir el dinero, según una encuesta realizada por Morning Consult.