Texas y Georgia anunciaron el 23 de marzo que los residentes de 16 años o más serán candidatos para recibir las vacunas contra la COVID-19. La medida entrará en vigor a partir del jueves para los residentes de Georgia y del lunes para los de Texas. Las entidades se unen así a una lista creciente de estados que planean ampliar la elegibilidad de vacunación a todos los adultos en anticipación de la fecha límite del 1 de mayo que estableció el presidente Biden.
“Con cada dosis, Texas se acerca cada vez más a la normalidad y protege a más vidas de las hospitalizaciones y muertes por la COVID-19”, dijo el Departamento de Salud del estado en una publicación de Twitter.
Actualmente, solo Virginia Occidental, Alaska y Misisipi permiten que todos los adultos se vacunen. Otros, como Texas, han anunciado que ampliarán la cobertura próximamente: Utah, por ejemplo, abrirá la elegibilidad a todos los adultos el miércoles. Y Tennessee anunció la semana pasada que todos los residentes de 16 años o más podrían vacunarse a partir del 5 de abril. Otros estados como Nueva York, han ido ampliando la cobertura de manera gradual: los neoyorquinos de 50 años y más pudieron empezar a vacunarse el martes.
La ampliación de la elegibilidad para la vacunación se da cuando los funcionarios federales de salud han advertido de un posible cuarto aumento del virus mientras se propagan nuevas y preocupantes variantes, y animan a todos los estadounidenses a vacunarse. Biden ha dicho que habría suficientes vacunas hacia finales de mayo para todos los adultos e insinuado que —de vacunarse y seguir las precauciones sanitarias, como el uso de mascarillas— los estadounidenses podrían experimentar un regreso a la normalidad para las fiestas patrias del 4 de julio.
Las cifras de casos en Estados Unidos “se han estancado: eso no está bien, deberían seguir cayendo cada vez más”, dijo el martes en el programa Good Morning America Anthony Fauci, el experto líder en enfermedades infecciosas del país y uno de los principales asesores de Biden. Al día lunes, el promedio de casos en los últimos siete días en todo el país era de 54.000 diarios, según una base de datos de The New York Times, un nivel comparable con el de las cifras de octubre.
“Al estancarte de ese modo hay verdaderamente peligro de un resurgimiento”, dijo Fauci.
Alrededor del 25 por ciento de la población total de Estados Unidos ha recibido al menos una dosis de la vacuna y 14 por ciento están completamente vacunados. El ritmo de vacunación ha estado incrementándose en las últimas semanas a un promedio de 2,5 millones de pinchazos al día, muy por encima de la tasa de hace dos meses, cuando se distribuían menos de un millón de dosis diariamente. La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, dijo el martes que se asignarían un total de 27 millones de dosis a los estados, farmacias y otras jurisdicciones y programas, cuatro millones de las cuales serían de la vacuna de Johnson & Johnson.
En el estado de Texas, alrededor de 22 por ciento de los habitantes ha recibido al menos una dosis de la vacuna, y el 11 por ciento están completamente vacunados, según un análisis de los datos de los CDC realizado por The New York Times.
Este mes, el gobernador Greg Abbott eliminó el mandato de usar cubrebocas del estado y retiró las restricciones de aforo a todos los negocios, una medida que suscitó críticas de los funcionarios federales, entre ellos el presidente. En aquella ocasión, Abbott tuiteó: “Texas está 100% ABIERTO”.
Alrededor del 19 por ciento de los residentes de Georgia han recibido al menos una dosis de una vacuna, según una base de datos del Times. El gobernador Brian Kemp dijo que, hasta el martes, más de un millón de residentes mayores han recibido al menos una dosis de la vacuna.
“Como todos ustedes saben, este es nuestro tiquete de vuelta a la normalidad”, dijo Kemp. “Y nos estamos acercando a ese punto cada día”.
Los negocios en gran parte del país están abiertos y más de una decena de estados no cuentan con mandatos de llevar cubrebocas, según muestra una base de datos del Times.
En Carolina del Norte, el gobernador Roy Cooper dijo el martes que el estado flexibilizaría algunas de las restricciones a partir del viernes, entre ellas que iba a incrementar la cantidad de aforo para las reuniones masivas y el restablecimiento de horarios normales de consumo de alcohol en bares y restaurantes. Cooper mantendrá la orden estatal de portar cubrebocas.
En Virginia, el gobernador Ralph Northam anunció algunos cambios el martes, incluyendo la autorización de los lugares de deporte y entretenimiento para operar con capacidad adicional y el aumento del número de personas permitidas en los eventos en el interior y al aire libre. También emitió orientaciones preliminares sobre las ceremonias de graduación y las graduaciones en persona y continuará el uso universal de mascarilla.
El lunes, la directora de los CDC, Rochelle Walensky, dijo que los integrantes del equipo de Biden encargado del virus han contactado a los gobernadores y a otros funcionarios estatales sobre la propagación y detección de variantes y han intentado persuadirlos de “ralentizar el relajamiento” de las medidas.
“Simplemente no queremos volver a tener un incremento rápido de casos, y es muy posible que esto podría suceder”, dijo. “Lo hemos visto. Y cuando eso empieza a suceder nos quedamos muy por detrás”.
Foto: Jay Janner/Austin American-Statesman, vía Associated Press
Créditos: nytimes.com