¿Hostilidad hacia México?

Migración, incumplimiento del T-MEC e inseguridad crean presión en la frontera con Estados Unidos.

En materia económica y en defensa de los intereses de los inversionistas de Estados Unidos (EU) y de los acuerdos tomados en el T-MEC, la semana pasada un amplio grupo bipartidista de legisladores y senadores federales de Texas, y otros estados, enviaron una carta al Presidente Joe Biden en donde le piden que influya con el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) para que detenga sus esfuerzos para revertir las reformas energéticas que le abrieron este sector a las empresas extranjeras, por primera vez en casi ocho décadas, y que hoy afectan sus patrimonios y plantean inseguridad jurídica.

Después de la visita de Kamala Harris a México, y al no existir acciones públicamente abiertas para retomar el control de las fronteras ante los embates de los miles y miles de migrantes que siguen cruzando la frontera con Texas, los habitantes de las poblaciones de esta zona se sienten intimidados por lo que los republicanos llaman “una invasión sin precedentes” y “un terrorismo que amenaza la nación”; así que el país vecino -México-, no solo es ahora peligroso para ser visitado, sino que empieza a ser incómodo y peligroso.

Por otro lado, ciertas posiciones de México no abonan a un clima enrarecido por las mismas acciones presidenciales en materia de seguridad jurídica para las inversiones y en control del tráfico de indocumentados; y por ejemplo, la semana pasada el gobierno de AMLO demandó civilmente a los fabricantes de armas norteamericanas, sin que se entienda claramente porque se tomó esta acción en un momento donde otras presiones se ciernen sobre el clima político.

Sin embargo, al demandar México a los fabricantes de armas, no solo está atacando a la base de votantes republicana, sino también a la Asociación Nacional del Rifle (NRA), el consorcio de fabricantes de armas más influyente del mundo y uno de los principales contribuyentes de donativos para todos los legisladores.

Con ello, en alguna forma está atacando a la segunda enmienda constitucional de EU en donde se indica que los ciudadanos son libres de poseer armas.

De acuerdo con abogados defensores de la NRA, es posible también, que México pudiera ser contrademandado ya que, al haber iniciado una demanda directa, bajo la ley estadounidense pierde la inmunidad soberana de ser juzgado y condenado como país a cualquier daño y perjuicio por un monto que podría ser multimillonario.

Del primer análisis de la demanda ya especialistas en la materia han encontrado inconsistencias y defectos en la querella inicial que podrían ser no subsanables.

En este contexto, el Houston Chronicle indicó que, “en México, las empresas energéticas estadounidenses enfrentan una ‘expropiación lenta’. Desde que México aprobó reformas constitucionales en 2013 para acabar con el monopolio de las empresas energéticas estatales como Pemex, las empresas estadounidenses han invertido miles de millones de dólares en el sector energético de México. Pero luego de la elección de López Obrador en 2018, quien hizo campaña en contra de la decisión de abrir el sector energético de México “como dañino” para los trabajadores, hoy -esas inversiones extranjeras de buena fe-, han comenzado a debilitarse”.

Al comenzar agosto, México anunció que Pemex lideraría el desarrollo de un campo de petróleo y gas en el Golfo de México que había sido descubierto por la firma de Houston, Talos Energy.

A principios de este año, la Legislatura mexicana aprobó una ley que pone fin a una medida para abrir el mercado de combustibles a los minoristas distintos a Pemex y ordenó que su red eléctrica le diera preferencia a las plantas operadas por la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y se le diera favoritismo a la utilización de combustibles fósiles, acción en contra, no solo del T-MEC, sino también del espíritu ambientalista mundial.

Estimado lector, las acciones del ejecutivo mexicano no solo han aumentado los niveles de pobreza en México, sobre todo en millones de familias de la clase media, que han descendido en su calidad de vida, según lo reportó el CONEVAL, organismo que mide y evalúa el desempeño político y económico gubernamental.

Ahora bien, al emitir su estudio más reciente el CONEVAL tomó en cuenta factores como: ingreso corriente per cápita, rezago educativo promedio en el hogar, acceso a los servicios de salud y seguridad social, calidad y espacios de la vivienda, acceso a los servicios básicos en la vivienda y a la alimentación, entre otros, sin embargo, el resultado de todo esto es que las acciones e inacciones del gobierno de AMLO han brindado estos resultados para México y han creado un clima de percepción negativo.