TEXAS.- El domingo, Texas superó los cuatro millones de casos de COVID-19, cifra registrada en todo lo que va de la pandemia, convirtiéndose así en el segundo estado del país con mayor número de contagios sólo detrás de California.
Sin embargo, pese a que en las últimas dos semanas ha ido a la baja la curva de contagios, Texas lidera en Estados Unidos el promedio de casos diarios y hospitalizaciones. Además, es segundo lugar en fallecimientos por la enfermedad.
Apenas la semana pasada, el gobernador Greg Abbott celebraba en redes sociales la disminución de la tasa de hospitalizaciones por coronavirus.
“Las hospitalizaciones por COVID continúan disminuyendo; hoy fueron las más bajas en más de 6 semanas. Los últimos 2 días han sido las hospitalizaciones más bajas en un mes para los niños. De aproximadamente 7.5 millones de niños en Texas, hay 238 que están hospitalizados con COVID confirmado por laboratorio”, escribió en su cuenta de Twitter el pasado 25 de septiembre.
Una de las principales preocupaciones ante la continua detección de contagios es que solamente alrededor del 60 por ciento de los tejanos han recibido por lo menos una dosis de la vacuna contra el COVID, de los cuales el 51 por ciento ya completó su esquema de vacunación. Eso quiere decir que hay aún un 40 por ciento que no se ha inmunizado.
A medida que la variante Delta continúa su propagación, es mayor la preocupación del sector salud y de las autoridades, ya que justamente los miles de personas no vacunadas son las que tienen mayor riesgo de terminar en un hospital, o peor aún, fallecer por la enfermedad.
Pero el problema no termina aquí, los contagios van a continuar entre la población tejana si se dejan de seguir las medidas contra el COVID como el uso de la mascarilla. Un tema que ha generado mucha controversia entre la ciudadanía por el mandado que emitió el gobernador Greg Abbott hace algunas semanas, en el que se prohíbe exigir a trabajadores del sector educativo y todo el alumnado que usen el cubrebocas para asistir a las escuelas.
Hace aproximadamente dos semanas, Texas registraba un aumento en más del 2 mil por ciento de casos de COVID en niñas y niños que regresaron a clases presenciales. Padres y madres de familia siguen a la expectativa de lo que sucederá en las próximas semanas en cuanto a este tema.
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Foto: Bloomberg
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