Los datos del consumo en el sector minorista disminuyeron en mayo después de haber alcanzado un máximo en marzo cuando comenzó la distribución del tercer cheque de estímulo, la caída podría generar una discusión sobre la necesidad de otorgar un nuevo depósito directo
Según los datos del Departamento de Comercio, el gasto de los consumidores en el comercio minorista aumentó casi un diez por ciento en marzo tras el envío de la tercera ronda de cheques de estímulo. Sin embargo, los niveles de gasto aumentaron solo un 0.09% y continuaron su tendencia a la baja aún más en mayo, hasta alcanzar el -1.3%.
Los datos muestran que tras el reparto del tercer cheque de estímulo la gente gastó más a medida que más personas empezaron a utilizar el dinero de su depósito directo. A pesar que el desempleo continúa disminuyendo, también lo está haciendo los niveles del gasto.
¿Podría llegar un nuevo cheque de estímulo?
Los expertos han observado los datos económicos que muestran que el gasto de los consumidores ha estado ayudando a las familias estadounidenses a enfrentar la crisis. Sin embargo, ese impulso parece estar disminuyendo mientras en el Capitolio se intenta llegar a un acuerdo sobre el plan de infraestructura de Biden antes de la llegada del receso de verano.
Lo que está empezando a preocupar a los especialistas y a los legisladores es que el descenso del gasto de los consumidores continúe hasta los niveles que se registraron durante la primera fase de la pandemia de coronavirus. Es decir, en febrero de 2020 el gasto minorista de los consumidores ascendió a $525,000 millones de dólares, el mes pasado esa cifra fue de $620,000 millones de dólares.
Según el New York Times los expertos creen que los datos muestran que lo más probable es que los consumidores gastaron todo lo que necesitaban para remodelar sus casas o actualizar sus artículos tecnológicos durante los primeros meses de la pandemia. Ahora, en lugar de que el gasto continúe en el comercio minorista, los consumidores están adquiriendo otros servicios como viajes y servicios.
Durante el 2021 el gasto minorista puede indicar que los hogares pueden estar reteniendo su dinero o no tienen los ingresos disponibles necesarios para gastar a los mismos niveles de marzo.
Si los niveles de gasto siguen cayendo, podría ser una señal de alerta para los legisladores de que se necesita una cantidad adicional de pagos directos. Los datos de gasto de junio, julio y agosto serán fundamentales para entender las tendencias actuales.
Se espera que la vacunación está generando que más personas se sientan más cómodas al viajar, al ir al cine, conciertos, restaurantes y eventos deportivos. Sin embargo, un estudio de la Oficina Nacional Investigación Económica descubrió que casi el setenta por ciento de los demandantes de los beneficios de desempleo han visto cómo sus ingresos superan los niveles de cuando recibían un salario cuando trabajaban antes de la llegada de la pandemia.
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A medida que una docena de estados han recortado las prestaciones federales por desempleo y los trabajadores se reincorporan al mercado laboral en trabajos que les pagan menos de lo que ganaban con los beneficios de desempleo, el gasto podría disminuir.
Será en septiembre cuando finalicen las prestaciones federales por desempleo en todo el país y los legisladores tendrán una gran cantidad de indicadores para evaluar si la economía podría beneficiarse de una nueva ronda de cheques de estímulo, aunque la Casa Blanca no ha ofrecido seguridad de que esté impulsando una medida de tal magnitud.
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Créditos: laopinion.com
