El problema migratorio impacta en la relación comercial de Texas con México, que es estratégica para ambos países y entidades. Sólo en 2018 representó 116 mil 400 millones de dólares, y es crucial para las cadenas de suministro de América del Norte.
La actividad económica en los estados fronterizos con México fue de alrededor de 169 mil 500 millones de dólares, manifestó el doctor José María Ramos García, profesor-investigador de El Colegio de la Frontera Norte (ColeF).
Señaló que el viaje del expresidente Donald Trump a Texas para reunirse con el gobernador Greg Abbott visibilizó la relevancia del tema migratorio en el ámbito estatal.
En mayo se registraron 180 mil detenciones por cruces ilegales, con un 40% de reincidentes. A finales del 2020, fueron 25 mil los cruces, de acuerdo de acuerdo a la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP).
El debate que pretende plantear el ex mandatario Trump de la ineficaz gestión migratoria de la administración Biden y del impacto de la migración no se considera sea un tema central en el ámbito nacional.
El electorado estadounidense da prioridad a la reactivación del empleo, reducción de la pandemia, los temas fiscales, entre otros.
“Sin embargo, el impacto de la migración es en el ámbito local, estatal y regional, en el marco de las elecciones intermedias el próximo año”, enfatizó.
Señaló, entre otras, las medidas que desde marzo anunció el gobernador texano “de continuar el trabajo del expresidente de construir un muro y restaurar la ley y el orden a lo largo de la frontera”.
El académico especialista en la relación bilateral detalló que el comercio entre México y EU genera millones de empleos en la Unión Americana, mientras el intercambio mercantil entre Texas y México sustenta más de 382 mil puestos de trabajo.
Además, se estima que casi la mitad del Producto Interno Bruto (PIB) en los condados fronterizos de Texas y dos tercios del PIB en los estados fronterizos de México depende el comercio internacional.
Por otra parte, sostuvo que la emigración centroamericana y mexicana no disminuirá en el mediano plazo.
Las diferencias salariales entre Estados Unidos y los países del Triángulo Norte –Guatemala, Honduras y El Salvador– son enormes y aumentará la demanda de mano de obra irregular por el crecimiento de la economía estadounidense, en el contexto de la reactivación económica post-pandemia.
Retos de la administración Biden
Al analizar la visita de la vicepresidente Kamala Harris a El Paso, Texas, y los retos de la administración Biden en materia de gestión de la migración el corto plazo, Ramos García expresó:
“El gobierno de los Estados Unidos debería de gestionar los flujos de estos países con una mayor exigencia de corresponsabilidad migratoria, regularización de solicitudes de asilo de los menores migrantes no acompañados (MMNA), financiamiento al desarrollo local y una visión compartida de Estado de Derecho a los gobiernos centroamericanos”.
Y enfatizó: “el acercamiento de la vicepresidente Harris con la comunidad migrante es importante, pero insuficiente en un contexto de polarización con el partido Republicano y la necesidad de que tener su apoyo para la reforma migratoria de cuando menos 10 senadores republicanos.”
El especialista en gobernanza, seguridad y relaciones México-Estados Unidos, manifestó que existen avances importantes en la gestión migratoria. Entre otros:
Un procesamiento más eficaz de las niñas, niños y adolescentes no acompañados con la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (UCBP) y la eliminación de obstáculos para que puedan reunirse con sus padres o familiares.
Establecimiento de proceso y protocolos ordenados en la frontera aplicados en los trámites de más de 11 mil 900 personas que habían sido retornadas a México. Y ampliación de las vías lícitas para para la protección y oportunidades, así como la disponibilidad de seis mil visas para trabajadores temporarios no agrícolas, o visas -2B, destinadas a migrantes del Triángulo Norte para el año fiscal 2021.
Igualmente, una nueva Determinación Presidencial sobre Refugiados para el año fiscal 2021, que creó otros cuatro mil cupos para refugiados de América Latina y El Caribe, incluido el Triángulo Norte, de acuerdo al Departamento de Estado.
Considera el académico que estas acciones, entre otras, pretenden una gestión ordenada y humana para solicitar asilo y disuadir la migración irregular. “El reto es si efectivamente se podrá reducir, considerando la complejidad del problema”.
Y comentó que “tanto el gobernador Abbott como el ex presidente Trump criticaron a la vicepresidente Harris de no ir a visitar la región fronteriza más compleja, como es el Valle del Río Grande de Texas”.
Finalmente, consideró que la vicepresidente Harris tiene el desafío de hacer viable algunas políticas que regulen los flujos migratorios hacia Estados Unidos.
Mientras que el expresidente Trump enfrenta el reto de visibilizar de nuevo el tema migratorio en un momento en que la sociedad estadounidense tiene otras preocupaciones socioeconómicas.
Foto: AFP
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