Entre inflación e incertidumbre ajustan sus gastos para equilibrar su economía
Jaime Torres/El Diario de El Paso
Aunque se viva en Estados Unidos, o al igual que en otros países como México, los residentes paseños también sufren de la llamada ‘cuesta de enero’ después de los gastos de las fiestas decembrinas, época en la que se tiende a comprar en exceso por quedar bien con amigos y familiares.
De acuerdo a los economistas esta crisis temporal afecta las finanzas domésticas debido a las excesivas compras de fin de año, aumento de los precios en productos y servicios de primera necesidad, pago de impuestos y el regreso a clases.
“¡Híjole!, de por sí ya veníamos arrastrando esta crisis económica desde hace varios meses y ahora como que uno despierta más reflexivo y triste a la realidad”, dijo la señora Blanca Aguirre, residente del Valle Bajo, mientras contaba el dinero que destinará para el pago de las deudas contraídas.
Ella, al igual que miles de madres de familia, tendrá que hacer malabares para soportar los gastos de los próximos meses. “Creo que me tardaré al menos tres meses para equilibrar mis finanzas”, dijo la trabajadora de uno de los supermercados de la ciudad.
Y es que a pesar de la lenta recuperación económica en Estados Unidos, después de la pandemia del coronavirus, el fantasma de la inflación continúa golpeando el capital activo tanto de comerciantes como de las familias.
Es algo difícil distribuir nuestros ingresos, pagar nuestras deudas o invertir en algo rentable, debido a que los precios, que eran una referencia para elaborar nuestro presupuesto de la mejor manera posible, están distorsionados”, dijo Francisco Arias, comerciante dedicado a la venta de accesorios para automóviles.
Carlos González, ejecutivo de ventas de una televisora local, explicó que al tener la inflación, aumentan los precios, aumentan los costos, aumentan los salarios y vuelven a aumentar los precios. “Esto no ayuda en nada”.
Sin embargo agregó que una de las técnicas que aplica para salir de la crisis es cambiar hábitos de consumo, es decir, dejar de gastar más de lo que tiene aunque la oferta sea muy tentadora.
En eso coincide Ramón Trevizo, un comerciante originario de Ciudad Juárez pero con residencia aquí desde hace 40 años. “Debemos agarrarnos las manos y eliminar muchos antojos que no sean tan necesarios”, dijo el padre de tres hijos.
Y agregó: “Es lo malo de las tarjetas de crédito, que todo se nos antoja como si fuera dinero real. Eso hace mucho daño a nuestra economía”, dijo mientras charlaba con su amigo Carlos sobre el crítico tema, en el restaurante Tacos Chinampa, ubicado en Saul Kleinfeld y Edgemere, el cual reabrió sus puertas después de una pausa con motivo de las fiestas decembrinas.
“¡Ay carajo! ahora hay que empezar a pagar el dinero que no teníamos, a pagar todo lo que gastamos en diciembre… hay que pagarlo”, dijo Carlos a Ramón al preguntarle sobre las deudas contraídas en diciembre.
Para ello mencionó que es importante esforzarse un poco más para obtener dinero fresco, “sí hay que trabajar más para librarla y seguir enfrentando el gasto corriente. Los problemas internacionales como la guerra nos han obligado a tener dos o tres trabajos, pero está bien hay que darle para recuperarnos”, mencionó al mostrar una actitud optimista.
Dentro de las recomendaciones que dan los expertos para librar la ‘cuesta de enero’ están: elaborar un presupuesto y gastar lo necesario; guardar algo del bono para el mes de enero para enfrentar al menos el gasto corriente, liquidar deudas urgentes y evitar comer fuera de casa.
Créditos: diario.mx
