TEXAS – Con la celebración del Día de Acción de Gracias a la vuelta de la esquina el gobernador de Texas, Greg Abbott, le pidió este jueves a los texanos que no bajen la guardia ante el COVID-19 mientras que los números siguen creciendo en el estado y también descartó la posibilidad de volver a cerrar.
En una conferencia de prensa que se realizó en Lubbock, el mandatario anunció que a Texas llegará un tratamiento para el COVID-19 en un futuro cercano y ante la pregunta sobre la posibilidad de volver a cerrar el estado por el repunte de casos, la respuesta de Abbott fue contundente.
“Los cierres no conducirán a los resultados positivos que la gente cree, y podrían tener consecuencias económicas devastadoras”, dijo Abbott sobre la posibilidad de cerrar una vez más el estado.
Abbott también mencionó que el estado emocional de las personas sufre durante los cierres y que las complicaciones económicas que enfrentarían se agregarían las dificultades que ya enfrentan por los efectos de la pandemia.
Speaking in #Lubbock @GregAbbott_TX says “Shutdowns will not lead to positive results;” that lockdowns have “devastating economic consequences”
— Molly Hennessy-Fiske (@mollyhf) November 19, 2020
El gobernador dijo que algunos estudios que ha revisado indican que la propagación del virus puede ocurrir con mayor probabilidad en un ambiente social y reuniones casuales que en lugares ocupacionales como podría ser en los trabajos o escuelas, por ejemplo.
