A partir del pasado 1 de julio entró en vigor el T-MEC, la versión renovada del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) que estuvo vigente por alrededor de 25 años y uno de los principales acuerdos internacionales firmados por México.
“Tras meses de negociación y de expectativas, esta nueva etapa no solo es relevante para las grandes empresas, sino que representa un momento trascendental para las Pymes que, de hecho, representan 35% de las exportaciones mexicanas directas, según el Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico”, asegura Edmundo Montaño, director general de Drip Capital México, fintech especializada en exportadores.
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Sin embargo, desde antes del arranque, la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra), aseguraba que más de 90% de las medianas y pequeñas empresas no estaban preparadas para cumplir las disposiciones del nuevo acuerdo comercial.
Desde hace meses, se ha abierto la conversación sobre los principales cambios del T-MEC: la certificación de origen y los porcentajes que deberán cumplirse ahora por parte de las empresas que deseen exportar sus productos en este contexto; disposiciones legales para el comercio digital; las reglamentaciones relativas a las condiciones laborales, así como estándares anticorrupción, entre otros.
Pero, ¿cómo afecta esto y de qué manera pueden alinearse las Pymes exportadoras de México?
Por qué las PyMEs deben estar pensando en el T-MEC
“La primera mitad del año ha sido compleja por las tensiones comerciales y la pandemia del COVID-19, y, mientras la crisis sanitaria continúa, el panorama aún pinta difícil para el resto del año y el arranque el 2021”, explicó Edmundo Montaño, director general de Drip Capital México. “Como diversos organismos concuerdan, si bien el T-MEC implica retos, es una gran palanca para impulsar las exportaciones, mejorar la estructura de producción, de manufactura y logística y, en general, del comercio de nuestro país”.
El directivo explicó que el T-MEC podría impulsar la relocalización de empresas de manufactura de Asia a México para aprovechar la entrada al mercado de América del Norte, lo que significa una gran oportunidad para los empresarios y emprendedores del país.
“Por otro lado, al brindar certidumbre y hacer más sólida la relación comercial con Estados Unidos y Canadá, los dos mercados de exportación más importantes para nuestro país, incrementan las oportunidades para tener una mejor recuperación y crecimiento en los siguientes meses”, agregó.
Qué dice el T-MEC sobre las Pymes
El capítulo 25 del T-MEC aborda a las Pymes al reconocerlas como una parte crucial de la economía, así como para mantener el dinamismo y competitividad comercial. En ese sentido, tienen el propósito de ofrecerles nuevas oportunidades de expansión y de participación en los mercados internacionales.
Entre los puntos destacados de este capítulo están:
La creación de un comité de Pymes para identificar áreas de oportunidad, formas de promover la cooperación, analizar las mejores prácticas, dar apoyo y asistencia a PYMES exportadoras. En ese sentido, este grupo se encargará de desarrollar y promover seminarios, asesoramiento a la exportación y convocar a un Diálogo Trilateral sobre las PyMEs.
Los tres países acordaron fomentar un intercambio constante de información, con el compromiso de mantener un sitio web de acceso público que contenga información relativa a todo el texto del Tratado.
En cuanto a la solución de controversias, se establece que ninguna de las partes podrá recurrir a lo previsto en el Capítulo 31 del T-MEC.
Las obligaciones en el tratado que benefician a las Pymes son:
Procedimientos de Origen. Cabe mencionar que bajo el nuevo marco del T-MEC, las certificaciones de origen promovidas durante el TLCAN ya no serán válidas, sin embargo el proceso se ha simplificado y puede emitirse en una factura o cualquier otro documento comercial. En ese sentido, el Comité de Origen instaurado bajo este nuevo tratado considerará modificaciones o adiciones a las Reglamentaciones Uniformes para reducir su complejidad y proporcionar ejemplos u orientaciones que serían de particular ayuda para las Pymes.
Contratación Pública. El tratado busca la facilitación de la participación de PyMEs apostando por transparencia en los criterios de elegibilidad, la realización de la contratación por medios electrónicos e instando a que las partes consideren el tamaño, diseño y estructura de la contratación, incluido el uso de la subcontratación por PYMEs.
Comercio Transfronterizo de Servicios. En los artículos de este capítulo se insta a apoyar el desarrollo del comercio de servicios por PyMEs y de modelos de negocios habilitadores para las Pymes, como los servicios de venta directa, además de enfatizar que los procesos de autorización para un sector de servicios no impongan responsabilidades desproporcionadas sobre las Pymes.
Comercio Digital. Aborda tanto los servicios informáticos interactivos, así como datos abiertos gubernamentales para cooperar en identificar las formas en que cada Parte puede ampliar el acceso a y el uso de la información gubernamental, con el fin de mejorar y generar oportunidades comerciales, especialmente para PyMEs.
Derechos de Propiedad Intelectual. El Comité de Derechos de Propiedad Intelectual (Comité DPI) comprendido por representantes de gobierno de cada país tiene, entre sus tareas, la consigna de analizar cuestiones de propiedad intelectual particularmente relevantes a pequeñas y medianas empresas.
Laboral. En términos de cooperación, uno de los puntos vitales para asegurar que se cumplan las regulaciones laborales está la promoción de la productividad, innovación, competitividad, capacitación y el desarrollo de capital humano en el centro de trabajo, incluyendo en su enfoque a las PyMEs.
Medio Ambiente. En especial en el artículo dedicado a la pesca de Captura Marina Silvestre, existe un compromiso para el desarrollo y sustento de comunidades pesqueras, incluyendo la pesca artesanal, de pequeña escala y nativa. En ese sentido, en materia de medioambiente se hace un reconocimiento a las empresas pequeñas o locales con la intención de definir un marco de competencia, pero también de sustentabilidad.
Competitividad. El nuevo Comité de Competitividad tiene la enmienda de dar asesoramiento y recomendaciones para la competitividad de la economía de América del Norte, incluidas recomendaciones dirigidas a mejorar la participación de las PyMEs.
Anticorrupción. El capítulo explica que en cuanto a la participación del Sector Privado y la Sociedad, se deben adoptar medidas apropiadas con relación al sistema legal para desarrollar controles internos, programas de ética y cumplimiento o medidas para prevenir y detectar cohecho y corrupción en el comercio y la inversión internacionales, incluyendo asistencia a las empresas, en particular a las Pymes.
Buenas Prácticas Regulatorias. En el marco del T-MEC, los procesos de mecanismos y regulaciones deben contemplar las cargas, efectos económicos adversos significativos para las pequeñas y medianas empresas, además de que se instauran nuevas oportunidades para eliminar cargas regulatorias innecesarias.
¿Cómo y dónde pueden buscar apoyo las Pymes exportadoras?
Anteriormente, organismo como ProMéxico están enfocados a asesorar a las Pymes para entrar al mercado internacional. Sin embargo, existen otras organizaciones e iniciativas que dan impulso y guía a las empresas mexicanas, como las Casas México de Concanaco Servytur, Asociación Nacional de Importadores y Exportadores de la República Mexicana (ANIERM) y Consejo Mexicano de Comercio Exterior (Comce), así como organismos estatales dedicados al apoyo de exportadores.
Por parte del gobierno federal, la Secretaría de Economía ha tomado un rol importante en este rubro y cuentan con plataformas de apoyo a Pymes exportadoras, en especial para guiarlas para alinearse al T-MEC.
Es el caso de MIPYMES MX y la Subsecretaría de Comercio Exterior.
¿Qué pueden hacer las PyMEs para ser más competitivas en esta nueva etapa?
Adicional a los lineamientos establecidos en el Tratado que deben seguirse, hay otros elementos importantes a considerar respecto a las inversiones y procesos dentro de las empresas pequeñas y medianas.
“Para las PyMEs es un momento importante para transformarse, apostarle a mejorar sus estructuras y valerse de herramientas tecnológicas y financieras más ágiles, pues un tratado de este tipo pone un nuevo estándar de competencia de cara al comercio internacional”, indicó el directivo de Drip Capital, al emitir tres principales recomendaciones:
Las inversiones de capital (CAPEX) serán vitales, a la par que mejorar la liquidez será necesario tanto para competir, crecer y navegar la crisis económica. En esa línea, el financiamiento jugará un rol importante y las PyMEs deberán voltear hacia alternativas menos riesgosas y de mayor impacto.
Ofrecer productos de mayor valor agregado y que les represente mayores márgenes de utilidad. Esto, a su vez, facilitará pagar mejores sueldos para trabajadores más capacitados, un requisito crucial en materia laboral que ahora aborda el T-MEC.
Mejorar procesos industriales y de sus operaciones, así como de su administración financiera, en especial si quieren ser lo suficientemente competitivas para tomar un lugar en las cadenas de exportación y producción de la región, un cambio incentivado por las nuevas reglas de porcentaje de origen de los productos. Esto incluye invertir en automatización y procesos para ser más competitivas, eficientes y, en general, reducir costos, además de priorizar la transformación digital.
Foto: Kelsey Knight vía Unsplash
Créditos: entrepreneur.com
