Por: Shannon Najmabadi
Qiling Wang y Jordan Vonderhaar para The Texas Tribune
En el Texas Tribune Festival, Clay Jenkins y Lina Hidalgo, ambos demócratas, dijeron que los funcionarios locales y los expertos en salud entraron en un vacío de liderazgo dejado por los líderes estatales y federales.
Los jueces de dos de los condados más poblados del estado criticaron la respuesta del gobernador republicano Greg Abbott a la pandemia de coronavirus como politizada y retrasada en una conversación durante el Festival Texas Tribune que se transmitió el viernes.
El juez del condado de Dallas, Clay Jenkins, dijo que los líderes de Texas son “débiles” y “no pueden hacer frente” al presidente Donald Trump, quien ha calificado el virus como un “engaño”.
“Mire, algunos de nosotros decidimos seguir la ciencia y todavía lo estamos haciendo. No tomamos decisiones basadas en lo que creemos que es políticamente conveniente “, dijo Jenkins.
Más tarde añadió: “Cuando trabajé con el gobernador [Rick] Perry, él es republicano, yo soy demócrata, nunca fue político. Creo que esta administración simplemente no puede hacer frente al presidente Trump, y ha llevado a algunos resultados bastante desastrosos “.
La diferencia entre esta pandemia y los desastres anteriores, dijo Jenkins, fue Trump, quien “hizo todo al respecto” partidista y personalizado para él.
La jueza del condado Lina Hidalgo del condado de Harris, que incluye a Houston, dijo que había “mucha presión para hacer las cosas políticas, y creo que, ya sabes, algunas personas cedieron a eso y eso es realmente triste”.
La “falla fatal” fue que Abbott eliminó la capacidad de los funcionarios locales para imponer restricciones más estrictas para detener la propagación del virus, dijo.
Los portavoces de Abbott y Trump no respondieron de inmediato a las solicitudes de comentarios.
Las palabrerías de Abbott sobre exigir que las personas se cubran la cara provocó una ira particular entre los jueces demócratas en el panel TribFest.
El gobernador emitió un mandato de usar cubrebocas en todo el estado en julio después de resistirse a los pedidos para hacerlo antes. En un momento, prohibió que los gobiernos locales penalizaran a las personas que no usaban máscaras, antes de darse la vuelta para elogiar a un juez del condado que ordenó a las empresas exigir que sus empleados y clientes se cubrieran de cara cuando el distanciamiento social no era posible.
Abbott dijo en una entrevista televisiva en ese momento que el juez “finalmente se dio cuenta” de que el curso de acción estaba permitido bajo sus directivas. Los activistas de extrema derecha caracterizaron la orden como una violación de su libertad, mientras que los funcionarios locales criticaron a Abbott por dar instrucciones obtusas durante una crisis de salud.
Los expertos en salud dicen que las máscaras ayudan a frenar la propagación del coronavirus. Las nuevas infecciones diarias, que comenzaron a aumentar unas semanas después de que el gobernador permitió que las empresas comenzaran a reabrir en mayo, comenzaron a disminuir poco después de que Abbott impusiera el mandato de la máscara. El jueves se informaron casi 3.900 nuevas infecciones, sin incluir a las personas que dieron positivo en las pruebas de resultado rápido, y al menos 13.091 tejanos murieron con el virus.
“La realidad fue que el gobernador al principio no quería que se hicieran cumplir las máscaras y luego cambió de opinión con la presión abrumadora de la comunidad médica, y trató de darle vueltas como si tuviéramos la autoridad para hacerlo todo el tiempo, pero fueron demasiado lentos para resolver su acertijo ”, dijo Jenkins. “Ha sido un liderazgo muy confuso y una falta real de comunicación por parte del estado. Pero nos hemos unido, los jueces del condado y la comunidad médica, y lo hemos superado con un vacío proveniente de Washington y Austin “.
Hidalgo dijo que la orden de las máscaras era el ejemplo perfecto de la respuesta politizada a la pandemia.
Si se hubieran tomado medidas antes, “¿cuántas vidas, cuánto habría mejorado la economía? ¿Cuánto más sostenibles serían las cosas si no hubiéramos reabierto demasiado pronto [para complacer] a ciertos intereses? Quizás, o seguramente, estaríamos donde están otras comunidades que mantuvieron el rumbo hasta que aplastaron la curva ”, dijo.
El Texas Tribune es una organización de medios sin fines de lucro y no partidista que informa a los texanos, y se relaciona con ellos, sobre políticas públicas, política, gobierno y asuntos estatales.
Texas Tribune. Traduccion Javier Amieva
Créditos: www.TexasTribune.org
