La pandemia ocasionó lo que las guerras, nevadas, tormentas o el intenso calor no habían logrado: la cancelación del juego del Tazón del Sol, que de manera ininterrumpida se había realizado desde 1935 en El Paso.
El impacto económico será palpable en la región fronteriza, que perderá hasta 15 millones de dólares de forma directa, de acuerdo al doctor David Schauer, del Departamento de Economía de UTEP. La pérdida mínima sería en el orden de los 12 millones, dependiendo de factores como qué equipos participan en el tradicional encuentro deportivo.
Schauer detalló en su estudio “Impacto Económico del partido del Brut Sun Bowl 2006” la derrama económica que se captaría en ocupación hotelera, en la rama restaurantera, así como de transporte y servicios locales.
Bernie Olivas, director ejecutivo de la Asociación del Sun Bowl (SBA), consideró que cancelar el tradicional juego anual del Tazón del Sol fue “la decisión correcta”, aunque enfatizó que no fue fácil llegar a esta medida 30 días antes de la fecha programada para el partido de futbol americano colegial.
“No queremos exponer a la gente que viene de otras partes, que pudieran contagiarse y llevar el virus a sus casas”, dijo el martes Olivas a través de una conferencia de prensa virtual, en la que hizo oficial la cancelación del juego que desde el lunes por la tarde se hizo pública.
“Fue la primera cosa que pensamos, la salud de la gente, especialmente por la situación que se vive en El Paso”, señaló Olivas.
El director de la SBA, reconoció que económicamente la cancelación afecta a la ciudad de El Paso por los ingresos que dejará de recibir, por ejemplo, el proveniente de todos los visitantes que llegan para apoyar a los equipos que compiten en el terreno de juego.
Pero también se verán afectadas muchas personas que toman parte en la logística que se arma alrededor del Tazón del Sol y que este año no podrán contar con el ingreso económico que eso les generaba.
El estudio del catedrático Schauer sostuvo que dichas cifras no incluyen la reinversión de la derrama económica a nivel local, y tampoco la exposición que el juego otorga a El Paso a nivel nacional, efectos que se desvanecerán por la cancelación del evento más importante del año en la ciudad.
En dicho sentido, Olivas adelantó que la compañía Kellogg’s, patrocinadora del juego y que le da el nombre de ‘Tony the Tiger Sun Bowl’, va a hacer lo más que pueda por ayudar a esa gente.
“Kellogg’s conoce la importancia del juego y saben que hay personas que no van a poder hacer dinero, entonces la compañía hará sus planes para ayudarlos, pero yo no puedo decir cómo, cuánto y cuándo, pero sí van a ayudar a la gente que va a perder su trabajo”, expresó el directivo.
“Desde los que ayudan en el estacionamiento y los de mantenimiento hasta el equipo de concesiones y los acomodadores, Tony the Tiger se asegurará de que los trabajadores del Sun Bowl reciban su cheque de pago habitual en esta temporada navideña. Además, Frosted Flakes donará un millón de comidas a los bancos de alimentos de El Paso”, declaró la compañía Kellogg’s a través de un comunicado enviado por la Asociación del Sun Bowl.
De haberse llevado a cabo el partido, Olivas mencionó que no iba a ser la misma dinámica de los años anteriores, pues en esta ocasión los equipos no iban a estar toda una semana en la frontera, sino solamente unos cuantos días y en una burbuja, es decir, del hotel al entrenamiento, de ahí al hotel y después del juego de regreso a sus ciudades.
Olivas afirmó que si se le puede ganar al virus, en febrero del próximo año empezarán con los trabajos de planeación del Sun Bowl 2021 y todos los eventos que se generan alrededor de este juego.
“Hacemos planes para que el juego sea mejor que el del año pasado. De febrero a diciembre tenemos que planear de 15 a 16 eventos, como el desfile, el torneo de basquetbol, el de golf, no es nada más el Tony the Tiger Sun Bowl”.
Impacto real
Aunque la cancelación del Sun Bowl no permitió saber la identidad de los equipos que visitarían la Ciudad del Sol, el modelo del economista David Schauer da una idea aproximada a la pérdida y los renglones afectados en la localidad.
En el estudio “Juego de futbol entre UTEP y UT-Austin: Impacto Económico en El Paso, Texas”, que data del 2008, Schauer señaló entre las principales vertientes las siguientes:
El volumen del incremento de actividad económica entre los aficionados visitantes, contando efectos directos e indirectos.
Del mismo modo el volumen del incremento de actividad económica proveniente de los equipos participantes, efectos directos e indirectos.
A estos puntos se agrega el valor de la exposición a los medios que se realiza por la cobertura del evento principal, la semana previa de festejos y la promoción turística de la ciudad y sus alrededores.
En sus apreciaciones el doctor Schauer pondera el hecho de que cuando un equipo participa en el Tazón del Sol, y es originario del estado de Texas, la ocupación hotelera puede decaer debido a que varios de los fanáticos que siguen al equipo pueden hospedarse con amistades o familiares, mientras otro segmento ocupa lugares de estacionamiento para casas rodantes.
De cualquier modo los gastos promedio por persona al visitar El Paso son principalmente en: alojamiento (15.2%), comida y bebida (31.4%), entretenimiento (15.3%), transporte (20%) y otros conceptos (18.1%).
El promedio de gasto de un visitante puede cambiar de acuerdo a la variable que representa el lugar de origen de los aficionados al futbol americano que visitan El Paso, ya sea de una ciudad lejana o cercana.
Incluso el gasto directo que ingresa a El Paso tiene un impacto secundario o indirecto, de acuerdo a Schauer.
“Este beneficio de ‘reinversión económica’ se debe al hecho de que las personas y empresas que reciben gastos directos de los visitantes del área asignarán al menos una parte de estos ingresos a las compras locales de bienes y servicios”, dijo el investigador de UTEP.
“Luego, estos fondos son recibidos por los residentes del área y las empresas que, a su vez, gastarán una parte de estos dólares en productos y servicios adicionales”, agregó. El llamado “efecto multiplicador” de los ingresos que provienen del partido del Tazón del Sol, sugiere que el beneficio económico total para una región será un múltiplo del gasto directo original de cada visitante.
Del mismo modo, la cancelación del partido traerá consigo la pérdida de una derrama económica importante en la región, misma que se había preparado todo un año para el tradicional evento que oficialmente ha sido cancelado.
Por Roberto Carrillo y Eduardo Moran / El Diario
Créditos: diario.mx