La administración del presidente Joe Biden enfrenta lo que ha llamado “una emergencia” en la frontera con México ante el incremento de niños no acompañados.
Las autoridades han descartado llamar el nuevo flujo de inmigrantes como una “crisis”, pero el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) está tomando diversas acciones.
La Cámara de Representantes, Nancy Pelosi (California), acusó al gobierno de Donald Trump de haber dejado una situación “rota” en la frontera, lo que ha complicado la atención de menores.
“Lo que la administración ha heredado es un sistema roto en la frontera y están trabajando para corregir eso en el interés de los niños”, dijo Pelosi a ABC News.
La semana pasada, las autoridades enfrentaron un nuevo récord al procesaron a más de 3,500 niños.
Ayuda extra
El secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, pidió a la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA) apoyar durante 90 días en la frontera.
“El Gobierno federal está respondiendo a la llegada de un número récord de personas, incluidos niños no acompañados, a la frontera suroeste”, indicó Mayorkas.
El funcionario dijo que se busca procesar lo antes posible a los menores, a fin de que puedan ser reclamados por algún patrocinador o familiar.
“La fuerza laboral del DHS, incluida la CBP, el Servicio de Protección Federal, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas y los voluntarios de todo el Departamento a través de la Fuerza de Voluntarios del DHS, ayudarán a proporcionar capacidad de refugio, seguridad y otro tipo de apoyo”, adelantó.
“No es seguro venir”
La Administración Biden mantiene su mensaje a los inmigrantes de que “no es momento” de que viajen a los EE.UU., debido a lo inseguro del viaje y a la pandemia de COVID-19.
Nunca es seguro venir a Estados Unidos a través de canales irregulares y esto es particularmente cierto durante una pandemia”, dijo Mayorkas. “Para proteger eficazmente tanto la salud y la seguridad de los migrantes como de nuestras comunidades de la propagación del COVID-19, a las personas detenidas en la frontera se les sigue negando la entrada y se les retorna”.
Sin temor a ICE
Durante la Administración Trump se implementó un acuerdo de colaboración que permitía a la Oficina de Reasentamiento de Refugiados (ORR) dar acceso a ICE para registrar huellas digitales, fotografías y otra información de los inmigrantes, quienes luego eran perseguidos.
Eso provocó que decenas de menores no recibieran ayuda de sus familiares o conocidos. El viernes, la Administración Biden terminó con ese acuerdo.
“Hoy [termina] un acuerdo de 2018 que socavaba los intereses de los menores y que tenía un efecto aterrador en los posibles patrocinadores (generalmente un padre o una persona cercana) interesados en patrocinar a un menor”, indicó la agencia atendida por Mayorkas.
Créditos: laopinion.com