Se encontraba bajo licencia administrativa con goce de sueldo desde mayo
La superintendente adjunta de finanzas y operaciones del Distrito Escolar Independiente de El Paso renunció para trabajar para Fort Worth ISD, meses después de que se le dio una licencia administrativa con goce de sueldo
La partida de Carmen Arrieta-Candelaria crea otro puesto vacante de liderazgo superior que debe ocupar la nueva superintendente Diana Sayavedra, que incluye a la jefa de gabinete y directora de comunicaciones.
El Distrito Escolar de Fort Worth anunció la contratación de Arrieta-Candelaria como su nueva directora financiera el 4 de enero. El distrito del condado de Tarrant tiene alrededor de 25 mil estudiantes más que EPISD.
La renuncia a EPISD entró en vigencia el 7 de enero, según una carta del 17 de diciembre de 2021 que envió al entonces superintendente interino Vince Sheffield.
Arrieta-Candelaria no ha devuelto una llamada para hacer comentarios.
Fue puesta en licencia paga a principios de mayo, junto con la entonces directora académica, Tamekia Brown. En ese momento, EPISD no reveló la razón detrás de esta acción, calificándola de “asunto de personal”.
El vocero del distrito, Gustavo Reveles, no respondió un correo electrónico en busca de una declaración actualizada.
Las dos administradoras fueron suspendidas días antes de que la Junta Directiva se reuniera a puertas cerradas para revisar una auditoría interna de los contratos con los proveedores de servicios académicos.
La auditoría encontró “una apariencia de conflicto de intereses” entre el ex superintendente Juan Cabrera y dos proveedores, así como documentación insuficiente o inexistente para otros contratos. Cabrera renunció en noviembre de 2020.
El auditor interno del distrito recomendó que se recuerde a los administradores de alto nivel sus responsabilidades fiduciarias y el proceso para plantear inquietudes sobre posibles irregularidades. Los hallazgos del auditor no identificaron a ningún administrador individual.
A principios de mayo, Arrieta-Candelaria alertó al auditor sobre el empleo del hijo de Cabrera con otro proveedor del distrito.
En agosto, Arrieta-Candelaria emitió un comunicado a través de la abogada Lynn Coyle que decía: “La señora Arrieta-Candelaria debe participar activamente en sus funciones como Superintendente Adjunta de Finanzas y Operaciones del distrito. Está ansiosa por servir a los estudiantes, padres y maestros del distrito ya que el nuevo año ya comenzó”.
Brown renunció a su cargo el 31 de agosto. En ese momento, le dijo a El Paso Matters en un comunicado: “Siempre apreciaré los seis años que he podido servir en EPISD y estoy orgullosa de lo que mi equipo y yo hemos logrado juntos.”
Reveles, el portavoz del distrito, dijo el mes pasado que el puesto de director académico estaba “cerrado, pendiente de revisión por parte del superintendente entrante”.
En los ocho meses que Arrieta-Candelaria estuvo de licencia, recibió aproximadamente un salario de 150 mil 600 dólares antes de las deducciones, según los talones de pago que EPISD entregó a El Paso Matters.
La Mesa Directiva de EPISD tiene programado discutir una apelación de queja de Arrieta-Candelaria en su reunión especial del martes. Los detalles de la queja no se han hecho públicos.
Antes de su contratación en 2016, Arrieta-Candelaria formó parte de la junta de regentes designada por el estado que dirigió EPISD a raíz de que fue detectado un esquema de fraudes en la institución. La directiva contrató a Cabrera en 2013.
Arrieta-Candelaria desempeñó un papel importante en la supervisión del programa de emisión de bonos de EPISD en 2016. Con 668.7 millones de dólares es el más grande en la historia del condado.
Por Molly Smith/El Paso Matters
Créditos: diario.mx
