La ley, promovida por el senador paseño César Blanco, busca honrar el legado de Vanessa Guillén
Austin— Un año después de que una soldado de Fort Hood fuera asesinada por un miembro del Ejército, los legisladores de Texas están preparados para ayudar a liderar la nación en la lucha contra el acoso sexual y las agresiones en el U.S. Army.
El proyecto de ley propuesto en memoria de la soldado Vanessa Guillén y aprobado por el Senado estatal el 12 de abril, daría a los miembros del Ejército en Texas más formas de denunciar delitos fuera de su cadena de mando y de que los Texas Rangers investiguen esos delitos de forma independiente.
El proyecto de ley se dirige a la Cámara para su votación. Una propuesta similar se presentó al Congreso el otoño pasado.
“Fue aprobada por unanimidad en el Senado. No hay oposición”, dijo el senador estatal César Blanco, demócrata por El Paso, autor del proyecto de ley de Texas.
“Creo que eso demuestra al Congreso que éste no es un proyecto de ley partidista, que cuando republicanos y demócratas trabajan juntos en reformas significativas para las fuerzas militares, ese cambio puede ocurrir”, agregó Blanco.
Guillén, de 20 años, fue reportada como desaparecida el 22 de abril de 2020, y sus restos desmembrados y carbonizados fueron encontrados el 1 de julio.
Investigadores federales dijeron que su compañero soldado de Fort Hood, Aaron Robinson, quien se suicidó durante la investigación, la mató. La familia de Guillén dice que creen que Robinson también la acosó sexualmente, pero el Ejército dice que no tienen evidencia de este delito por parte de Robinson.
El caso de Guillén se convirtió en un grito de guerra para que las sobrevivientes de agresiones sexuales militares denuncien sus experiencias, y ese movimiento ha provocado pedidos de cambio cultural dentro del Ejército, desde Texas hasta Washington.
El proyecto de ley de Blanco también establecería un coordinador de respuesta a la agresión sexual fuera de la cadena de mando para proporcionar ayuda y recursos a los miembros del Ejército en Texas que denuncien casos de violencia sexual, ya sea que el informe se presente o no ante la Policía o dentro del Ejército. Es uno de los múltiples proyectos de ley presentados a la Legislatura de Texas en esta sesión en honor a Guillén.
Las agresiones sexuales son muy poco reportadas en la población en general, y el Ejército ha reconocido durante años que es un problema particular en sus filas.
La familia de Guillén y su abogada, Natalie Khawam, han dicho repetidamente que Guillén tenía demasiado miedo de denunciar a su cadena de mando el acoso que estaba enfrentando.
Lupe Guillén, hermana de Vanessa, dijo esta semana que la madre de Guillén le dijo a su difunta hija que rompiera su contrato y regresara a casa si no se sentía segura después de que su hija le contara el acoso y el miedo que estaba enfrentando en la base.
“Mi hermana respondió: ‘¿Quieres que vaya a la cárcel?’”, dijo Lupe Guillén. “Una vez que firmas el contrato eres de su propiedad, eres su número. ¿Cuándo vamos a proteger a la víctima y no al victimario?”
En el año transcurrido desde la muerte de su hermana, dijo Lupe Guillén, la familia aún no ha visto cambios significativos. Hicieron una conferencia de prensa el martes para continuar su lucha con representantes y senadores de Texas para conmemorar el sombrío aniversario con una serie de propuestas legislativas que incluirían nombrar parte de una carretera en honor a Guillén, y una resolución para que el Congreso apruebe un proyecto deley similar, bipartidista, la ley ‘Yo soy Vanessa Guillén’. Khawam dijo que la familia espera una audiencia del Congreso sobre ese proyecto de ley en mayo.
“Para todas las voces en el Ejército, es muy frustrante para nuestros hombres y mujeres preguntarse cuándo estarán protegidos, cuándo se implementarán estas protecciones”, dijo Khawam. “Si no le temes a una bala pero tienes miedo de denunciar el acoso sexual, sabes que hay algo realmente mal en el sistema”.
Blanco, quien es veterano de la Marina de los Estados Unidos, dijo que el Ejército le había fallado a Guillén y que quería asegurarse de que Texas no hiciera lo mismo.
Un caso penal civil sobre el asesinato de Guillén permanece abierto, y continúan múltiples investigaciones dentro del Ejército sobre las muertes y el liderazgo en Fort Hood.
Los resultados de una revisión independiente de la base publicada en diciembre llevaron a la suspensión o el despido de al menos 14 personas de la base de Texas, inspiraron a la Operación Gente Primero –People First– por parte de los líderes militares a reconstruir la confianza y encontraron que la base de Texas tenía un patrón generalizado de violencia, incluido el asesinato, la agresión sexual y el acoso.
Por Acacia Coronado/Associated Press
Foto: Associated Press
Créditos: diario.mx