Expertos médicos locales señalan que el primer aniversario del tiroteo masivo del 3 de agosto en El Paso es un momento difícil para la comunidad fronteriza, especialmente para aquellos afectados por el ataque directa o indirectamente.
“Las personas que sobrevivieron a ese día en Walmart de Cielo Vista aún pueden sentir un trauma emocional, al igual puede afectar a las personas, que aunque no terminaron con lesiones, estaban allí trabajando o comprando. De igual forma afecta a las personas que estaban en la primera línea de respuesta de la emergencia, dijo Sarah Martin, doctora y profesora asistente y jefa de la División de Niños y Adolescentes del Departamento de Psiquiatría del Centro de Salud y Ciencias de la Universidad Texas Tech El Paso (TTUHSC).
Martin, quien también es especialista en psiquiatría infantil y adolescente, dijo que es común que los síntomas del trastorno de estrés postraumático emerjan mucho después de un incidente traumático y en los aniversarios, pueden ser particularmente angustiantes.
“Los estudios han demostrado que la disfunción psicosocial se puede aumentar hasta tres años después”, dijo Martin.
“Los aniversarios son importantes para la mayoría de las personas, pero el efecto puede variar de una cultura a otra”, añadió.
“Algunas personas usan un aniversario para honrar a la persona que ha muerto, mientras que otras tienen un aumento en los síntomas de TEPT en ese momento. Es difícil predecir de qué manera reaccionará una persona”, dijo Martin.
Las secuelas
Uno de los ejemplos más sobresalientes, fue la participación del equipo de soccer infantil EP Fusion, en uno de los juegos de inauguración de El Paso Locomotives y Bravos de Ciudad Juárez.
Dos semanas después del tiroteo el equipo de El Paso Locomotives invitó al equipo de niñas a ser parte de la ceremonia de apertura del juego. Sin embargo, no salió como se esperaba.
Padres, entrenadores y el equipo entero de EP Fusion se encontraban en Walmart el día del tiroteo recabando fondos para el equipo. Dos de sus entrenadores, perdieron la vida al ser víctimas de los disparos del atacante.
En un video que circula en redes sociales, se visualiza a las niñas en medio de la ceremonia llorando después de escuchar fuegos artificiales detrás.
“Un montón de fuegos artificiales salieron de la nada, y fue como ‘oh Dios mío, ¿está pasando de nuevo?’”, expresa una de las menores, integrante del equipo.
“Fue cuando todas empezamos a llorar”, añade.
Un trastorno invisible: La culpa
Una gran cantidad de médicos de Texas Tech de El Paso formaron parte de los equipos de respuesta en los hospitales locales que atendieron a las víctimas el 3 de agosto.
Expertos alegan que, aunque las personas que se vieron afectadas indirectamente por el tiroteo pueden no tener el síndrome de trastorno de estrés postraumático completo, pero pueden tener algunos de los síntomas.
Los ejemplos de personas afectadas indirectamente incluyen aquellos que perdieron a un pariente o amigo en el tiroteo, e incluso pueden afectar a un niño que sabía que sus padres estaban en la tienda en ese momento.
Al igual que los sobrevivientes o afectados directamente, Martin agregó que los empleados de Walmart que tenían el día libre o estaban fuera de la tienda en ese momento, podrían experimentar la culpa del sobreviviente.
“Muchas personas que tienen síntomas a largo plazo tienen el punto de vista de que de alguna manera son responsables de que una persona se lastime o sea responsable del trauma de alguna manera. Aquellos que están agobiados por esta culpa a menudo sufren los síntomas más severos”, dijo Martin.
“Otras personas que comparten el punto de vista de que Dios está a cargo, o que las cosas que nos pasan están más allá de nuestro control, tienen menos probabilidades de tener síntomas a largo plazo”, expresó.
Insta a que si alguien muestra signos de trastorno postraumático más de un mes después del incidente, deberían considerar buscar tratamiento profesional.
Llorar es terapéutico
Martin alegó que llorar el aniversario del tiroteo puede ser terapéutico, similar a como es la celebración agridulce del Día de los Caídos.
“No quieres evitar los malos sentimientos por completo, porque pueden ser útiles para ayudarte a seguir adelante con tu vida. Más bien son los sentimientos negativos los que nos mantienen atascados y evitan que sigamos adelante: esos son los que queremos trabajar con las personas para que puedan sanar”, dijo Martin.
“Algunos sentimientos podrían regresar, o aparecer por primera vez, en un aniversario. Definitivamente es un momento en que las personas pueden sentirse tristes o tener síntomas como pesadillas, que es un síntoma común del trastorno”, enfatizó.
Pide a aquellas personas que les resulta difícil lidiar con el recuerdo del tiroteo o cualquier otro incidente traumático, hacer algo positivo para distraerse.
Martin sugiere correr, hacer jardinería u otras actividades agradables y productivas. Evitando por completo formas destructivas de afrontamiento, como consumir alcohol, pelear y el uso de drogas.
“No es tanto si lo reprimes o no lo reprimes. En cambio, nos enfocamos en lo que haces con esas emociones. ¿Las conviertes en algo positivo o negativo? La recuperación puede ser muy difícil, y aceptar la ayuda de un terapeuta puede ayudar a una persona a recuperarse más rápida y completamente”, explicó.
“Lo más importante, si recuerda algo triste o traumático, trate de recordarlo de una manera que le ayude a usted mismo o a los demás y que no disminuya su funcionamiento o cause problemas para su propia salud. Eso es lo que más nos preocupa”, expresó la doctora.
Aquellas personas que sienten que pueden necesitar ayuda para lidiar con el trastorno post traumático a causa del tiroteo, pueden programar una cita en la Clínica Ambulatoria de Psiquiatría de Texas Tech Physicians of El Paso llamando al 915-215-8400 o enviando un correo electrónico a transmountainappointments@ttuhsc.edu.
Además, la Línea Directa de Crisis de Salud del Comportamiento de Emergence Health Network está disponible para los residentes de El Paso 24/7. Los consejeros pueden ser contactados al 915-779-1800.
Mucho ojo…
Los síntomas del trastorno de estrés postraumático son:
Recuerdos no deseados recurrentes del evento, incluidas pesadillas.
Evitar situaciones que le recuerden el evento, incluso evitar buscar ayuda porque tendrá que pensar o hablar sobre el evento.
Cambios negativos en su forma de pensar acerca de usted u otros.
Hiperactivación: siempre alerta, atento al peligro. Debido a esto, es posible que no pueda concentrarse en las tareas y tenga problemas para dormir.
Por Sabrina Zuniga / El Diario de El Paso
Créditos: diario.mx