Supervigilancia en las fronteras: Estados Unidos refuerza inspección fronteriza

  • Instalarán cámaras capaces de identificar rostros dentro de autos en segundos

La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) de Estados Unidos publicó una Solicitud de Información (RFI, por sus siglas en inglés) con el objetivo de identificar soluciones tecnológicas avanzadas que permitan capturar y procesar imágenes faciales de alta calidad de los ocupantes de vehículos en los puertos de entrada terrestres.

El requerimiento forma parte del esfuerzo de la Oficina del Programa Biométrico de la CBP por reforzar el control fronterizo mediante herramientas que permitan verificar la identidad de los viajeros antes de que entren en contacto con los oficiales. Estos recursos estarán destinados a operar en las denominadas “zonas primarias”, donde se realizan las inspecciones oficiales, y complementarán la captura de datos que se lleva a cabo en la “Zona Preprimaria” (PPZ), una etapa anterior del proceso.

Según la CBP, el objetivo es implementar un sistema que capture imágenes faciales en vivo desde el interior del vehículo para compararlas en tiempo real con bases de datos gubernamentales a través del Servicio de Verificación de Viajeros (TVS). De esta manera, se busca confirmar la identidad de cada viajero y actualizar su registro de cruce antes de cualquier interacción con el personal de frontera.

¿Cámaras con superpoder de visión?

La CBP ha dejado claro que cualquier tecnología propuesta debe funcionar en condiciones variables, como temperaturas extremas, deslumbramiento solar, baja visibilidad o vidrios polarizados. También se espera que el sistema pueda capturar imágenes nítidas incluso de los pasajeros ubicados en asientos traseros y que no estén mirando directamente a la cámara o estén parcialmente cubiertos por objetos personales.

La agencia contempla tanto dispositivos pasivos —que operan de forma automática— como soluciones activadas manualmente por los agentes, que podrían estar instaladas en cabinas o ser portátiles. En ambos casos, el sistema debe ser capaz de brindar retroalimentación en tiempo real a los oficiales para confirmar que la imagen ha sido adquirida correctamente, sin obstaculizar su visibilidad ni comprometer su seguridad.

¡China queda fuera de la apuesta!

En cuanto a ciberseguridad y privacidad, la CBP enfatiza que los dispositivos no podrán almacenar imágenes ni permitir el acceso a ellas fuera de la red, y deben superar evaluaciones de vulnerabilidad. También se prohíbe explícitamente el uso de tecnología proveniente de ciertas compañías chinas como Hikvision, Dahua y ZTE, por motivos de seguridad nacional.

Además, se exige que las soluciones estén disponibles comercialmente, sean compatibles con la infraestructura actual de carriles y puedan integrarse con el software de inspección de Vehículos de Llegada Simplificada (SA-V) de la agencia. Características adicionales como el ajuste remoto, procesamiento de imágenes integrado o eliminación de duplicados serán consideradas ventajas competitivas.

Finalmente, se solicita a los proveedores que detallen aspectos como consumo de energía, duración de batería, formato de datos, velocidad de transmisión (idealmente en un segundo), y que especifiquen si sus sistemas son capaces de diferenciar entre rostros humanos y otras imágenes.

Las propuestas deben enviarse antes del 30 de mayo y estar limitadas a 15 páginas.

CBP consolida así el uso de tecnología de reconocimiento facial, reforzando el discurso de seguridad nacional que se ha intensificado desde el inicio de la administración Trump en enero pasado.